Niños rescatados en la selva estarán bajo custodia del ICBF: “Hay dudas de la garantía de derechos”
Después de un arduo mes de recuperación en el Hospital Militar, se ha confirmado que los cuatro niños rescatados en las selvas del Guaviare quedarán bajo la custodia del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF). Estos menores, cuyas edades oscilan entre los 13 y 1 año, serán sometidos a un proceso de restablecimiento de derechos debido a los presuntos hechos de violencia intrafamiliar y abuso sexual que han salido a la luz durante su dramática historia.
El ICBF anunció que, en el marco de este proceso de restitución de derechos, los niños serán acogidos en un Centro de Protección, donde se llevará a cabo la restitución de sus derechos. Además, recibirán atención por parte de las mismas enfermeras que los auxiliaron durante su estadía en el Hospital Militar.
Astrid Cáceres, directora del ICBF, explicó: «Comienza la segunda parte de esta Operación Esperanza, que es el restablecimiento de los derechos de los menores». También señaló que el proceso de custodia tiene una duración legal de seis meses, durante los cuales la Defensoría de Familia investigará la situación familiar para evaluar las garantías de derechos, ya que existen dudas al respecto. Cáceres destacó la importancia de analizar las circunstancias en las que se encontraban los niños en el territorio antes de tomar una decisión final.
Después de casi un mes en el Hospital Militar, los cuatro niños rescatados, quienes estuvieron perdidos durante 40 días en las selvas del Guaviare, se han recuperado satisfactoriamente y recibieron el alta médica la noche del jueves.
Sin embargo, junto con la alegría por haber sido encontrados con vida, la historia conmovedora de estos menores también ha revelado presuntos actos de violencia intrafamiliar y abuso sexual en su hogar.
Las denuncias se centran en Manuel Ranoque, padre de uno de los niños de 5 años y de la bebé. Los familiares de Magdalena Mucutuy, la madre de los niños que falleció en un accidente el pasado 1 de mayo en Guaviare, han afirmado que Ranoque maltrataba a su pareja y presuntamente abusaba sexualmente de una de las niñas.
En junio, Ranoque negó las acusaciones de abuso sexual y argumentó que se trataba de una disputa económica entre las familias: «Considero a las dos niñas mayores como mis hijas, les he brindado educación y alimentación (…). Esto es una pelea económica entre familias (…). Me han acusado de violador, pero la niña ha cerrado la boca diciendo que soy su padre y quiero aclararlo».
Sin embargo, el sujeto admitió haber ejercido violencia verbal y física contra su pareja: «Físicamente, fue muy poco, ya que la mayoría de nuestros problemas eran de palabras. Los problemas familiares entre marido y mujer no son chismes para el mundo».
Con la custodia a cargo del ICBF, se espera que los cuatro niños rescatados puedan recibir la protección y el cuidado necesarios para su bienestar, mientras las autoridades investigan y evalúan las circunstancias que rodean su caso y toman decisiones basadas en el interés superior de los menores.
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